miércoles, 27 de junio de 2007

Coldplay - Fix You (Live At Glastonbury)

When you try your best, but you don't succeed
When you get what you want, but not what you need
When you feel so tired, but you can't sleep
Stuck in reverse

When the tears come streaming down your face
When you lose something you can't replace
When you love someone, but it goes to waste
Could it be worse?

Lights will guide you home
And ignite your bones
And I will try to fix you

And high up above or down below
When you're too in love to let it go
If you never try, then you'll never know
Just what you're worth

Lights will guide you home
And ignite your bones
And I will try to fix you

Tears stream down your face
When you lose something you cannot replace
Tears stream down your face
And I...

Tears stream down your face
I promise you that I'll learn from my mistakes
Tears stream down your face
And I...

Lights will guide you home
And ignite your bones
And I will try to fix you


Para Miranda. Para Nico.

Siempre me ha gustado este poema...

La princesa está triste... ¿qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave sonoro
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor.
El jardín puebla el triunfo de los pavos reales.
Parlanchina, la dueña, dice cosas banales,
y vestido de rojo, piruetea el bufón.
La princesa no ríe, la princesa no siente;
la princesa persigue por el cielo de Oriente
la libélula vaga de una vaga ilusión.
¿Piensa acaso en el príncipe de Golconda o de China,
o en el que ha detenido su carroza argentina
para ver de sus ojos la dulzura de luz,
o en el rey de las islas de las rosas fragantes,
o en el que es soberano de los claros diamantes,
o en el dueño orgulloso de las perlas de Ormuz?
¡Ay!, la pobre princesa de la boca de rosa
quiere ser golondrina, quiere ser mariposa,
tener alas ligeras, bajo el cielo volar;
ir al sol por la escala luminosa de un rayo,
saludar a los lirios con los versos de mayo,
o perderse en el viento sobre el trueno del mar.
Ya no quiere el palacio, ni la rueca de plata,
ni el halcón encantado, ni el bufón escarlata,
ni los cisnes unánimes en el lago de azur.
Y están tristes las flores por la flor de la corte;
los jazmines de Oriente, los nelumbos del Norte,
de Occidente las dalias y las rosas del Sur.
¡Pobrecita princesa de los ojos azules!
¡Está presa en sus oros, está presa en sus tules,
en la jaula de mármol del palacio real;
el palacio soberbio que vigilan los guardas,
que custodian cien negros con sus cien alabardas,
un lebrel que no duerme y un dragón colosal!
¡Oh, quién fuera hipsipila que dejó la crisálida!
(La princesa está triste, la princesa está pálida.)
¡Oh visión adorada de oro, rosa y marfil!
¡Quién volara a la tierra donde un príncipe existe
(la princesa está pálida, la princesa está triste)
más brillante que el alba, más hermoso que Abril!
-¡Calla, calla, princesa -dice el hada madrina-,
en caballo con alas hacia acá se encamina,
en el cinto la espada y en la mano el azor,
el feliz caballero que te adora sin verte,
y que llega de lejos, vencedor de la Muerte,
a encenderte los labios con su beso de amor!

Sonatina (Rubén Darío)

martes, 26 de junio de 2007

Érase una vez... (III)

Tal y como os lo cuento, un pasante trajo a mis oídos el último fragmento de la historia del príncipe oscuro y la muchacha encantada.

Estando de nuevo inmersa la muchacha en la monotonía, oyó muchas veces hablar del príncipe oscuro quien por aquellos lares, extraños para ella, parecía estar alcanzando una fama sólo achacada a los muertos.

Parecía la muchacha -cada vez más- una flor marchita. Si bien antes, aunque desencantada, lucía lozana y brillante, nadie se explicaba dónde quedó la muchacha linda de los ojos grandes y la sonrisa melancólica. Ni una triste mueca asomaba ya en su boca y ni un pestañeo arrancaba siquiera el viento de sus ojos.

Suspiraba aliviada cada vez que un día llegaba a su fin y se levantaba ansiosa esperando nuevas que rompieran la cotidianeidad en la que se movía desesperada. No lo admitía –qué mujer lo haría- pero esperaba ver al príncipe oscuro volver por ella. En sus sueños sentía el orgullo de saberle removiendo cielo y tierra buscándola. Quizá su silencio la salvó de la hoguera por bruja y adivina, costumbre bien común en aquellos tiempos.

Tal era su desvelo que un buen día despertó, no ansiosa como solía, sino decidida. Despidióse de su familia y partió dejando atrás la ciudad de su vida. Siempre negaría que fue ella la que salió en busca de una utopía; cómo ella -caminando y sin mapa- iba a encontrar al príncipe oscuro, sin saber siquiera dónde paraba aquel en ese instante. Confiaba ella en el amor sin estar segura de si lo era.

Mucho suponer sería el, sin saber, apostar por un encuentro fortuito. Más en cuestión de amores –o desamores- poca razón hace falta para que -amantes cegados- en acción entraran.

Quiso el azar que la fortuna les jugara una mala pasada. Mal momento eligió la muchacha y rápido en demasía acudió presto el príncipe a buscarla. Cruzáronse ambos en el camino. No esperaba la muchacha tan pronto encuentro ni el príncipe tan retrasado. Se vieron, se miraron y no se reconocieron.

No era el momento.

Triste o no, cierta o leyenda; aquí acaba la historia del príncipe oscuro y la muchacha desencantada.
Ramón de Mielina

lunes, 25 de junio de 2007

50 Años



El viaje de Jack Kerouac por Estados Unidos: drogas, sexo, amistad... todo vale para experimentar. La biblia de la Generación Beat, "En el Camino", cumple 50 años. Para los que no lo hayais leido; un libro que hay que leer.
A mí me trae muchos -y buenos- recuerdos...


Bonitas baldosas

sábado, 23 de junio de 2007

Para ver en Madrid

VAN GOGH Los últimos Paisajes

Museo Thyssen-Bornemisza
(hasta el 16 de septiembre)

...en sólo 70 días, Van Gogh produjo más de 70 cuadros y una treintena de dibujos...

Evolution of Dance

¡Impresionante!

viernes, 22 de junio de 2007

22 de junio...

Dicen que es cuestión de tiempo, pero yo sé que no es verdad porque cada día que pasa me acuerdo más de ti. Es mentira que el tiempo lo cure todo. Ahora estoy solo y me gustaría que estuvieras aquí para ver a nuestra primera nieta. Si la vieras... tiene tus ojos y tu sonrisa. Cada día salimos a dar un paseo y voy como decías siempre que iría: como un pavo real mirando a todos lados, orgulloso como un abuelo chocho. Como lo que soy, en realidad. Si estuvieras aquí, nos reiríamos pero seguro que tú también te empavonarías… Nada ha vuelto a ser igual. Al principio me dieron un margen y respetaron mi tristeza pero ya han pasado 3 años desde el accidente y ellos consideran que ya es tiempo más que suficiente. ¿Qué saben ellos? Esperan que esté feliz, que me ría como antes, que vuelva al club a echar la partida o que llame a la cuadrilla para salir a pasear. Ésa era mi vida contigo. No salgo tanto, sabes que eras tú la que me empujaba a tener tanta vida social. Me conoces, siempre he sido más de quedarme en casa y organizar algo en la terraza con los amigos. Nada de grandes jolgorios. Se empeñan en hacerme feliz. Soy feliz, en serio, pero no entienden que estoy incompleto, me siento incompleto. Sé que son jóvenes y no lo ven pero ésa era nuestra vida y no quiero seguirla solo; como si nada hubiera pasado. Íbamos a hacernos viejos juntos y el único que tiene arrugas soy yo. Tú continúas perfecta en la foto que puse en mi mesilla (¿sabes cuál te digo? La que te saqué en París hará unos 6 años… estabas impresionante, la luz no podía ser mejor y ese vestido…). Sigues igual de guapa que siempre y yo me voy haciendo más viejo cada vez. Te burlarías de mí si supieras que ahora llevo bastón. Sabes que nunca me han gustado los bastones pero, ahora, me miro en el espejo y me veo hasta elegante. ¡Fíjate que hasta estoy pensando en comprarme un sombrero de ala corta! Como los que llevaba tu padre... ¿te imaginas? María…

Ramón de Mielina

jueves, 21 de junio de 2007

La batalla

Al mirar por la ventana se veía hermoso el jardín, todo lleno de las flores y las plantas más dispares. Todo el mundo lo admiraba; no había persona que pasara a su lado que no se parara a verlo. Habían sido años recogiendo las flores más vistosas y las plantas más extrañas de todos los lugares del mundo.

Sin embargo, lo sentía vacío.

Quizá lo había llenado en exceso, sin otro criterio que el del avaricioso que lo quiere todo sin saber para qué. Vanidoso de él, que había perdido su linda parcela siguiendo sus ansias de ser admirado.

Recordó entonces su rosa, aquella que solía estar junto al camino que llevaba a la casa y que aguantó lluvia y frío, calor y ventiscas.

No hacía ahora sino sustituir las flores marchitas por otras o arrancar de cuajo las plantas secas.

¿Dónde estaba su rosa? Perdida entre la multitud ya no brillaba como antaño.

Sintió que se ahogaba, que le faltaba el aire. Molestaba a sus ojos tanto color y a sus oídos las exclamaciones de admiración de quienes al lado de su jardín pasaban. Corrió afuera y comenzó a arrancar cuanto encontraba a su paso.

Cansado ya, paró y miró alrededor con angustia; no la veía. Un jardín destrozado es lo que percibió en un primer vistazo.

Ahí estaba, junto al camino. Ya calmado, la regó y limpió los restos de la batalla a su alrededor. Cogió aire y volvió a la casa.

Ahora sí.

Ramón de Mielina

miércoles, 20 de junio de 2007

¿¡Quién dijo miedo?!
Me gusta la expresión "tirarse a la piscina"

Restaurante japonés (Madrid)


Ayer estuve cenando en un japo que merece la pena.
Si estais en Madrid o venís algún día (y si os gusta este tipo de comida, claro...):


MUSASHI

C/ Las Conchas 4
Tel.: 91 559 29 39
Horario: 13:30-16 h. / 20:30-23 h.
Lunes cerrado

Bat For Lashes - Whats a Girl To Do

Miranda, este vídeo es para ti... personas con cabezas de animales... uhhhhh! :-)

Natasha Khan (descubrimiento de Debo http://tiempoestimadodeespera.blogspot.com/)

martes, 19 de junio de 2007

Cuando no sea yo...

¿Cómo seré yo
cuando no sea yo?
Cuando el tiempo
haya modificado mi estructura,
y mi cuerpo sea otro,
otra mi sangre,
otros mis ojos y otros mis cabellos.
Pensaré en ti, tal vez.
Seguramente,
mis sucesivos cuerpos
-prolongándome, vivo, hacia la muerte-
se pasarán de mano en mano,
de corazón a corazón,
de carne a carne,
el elemento misterioso
que determina mi tristeza
cuando te vas,
que me impulsa a buscarte ciegamente,
que me lleva a tu lado
sin remedio:
lo que la gente llama amor, en suma.
Y los ojos
-qué importa que no sean estos ojos-
te seguirán a donde vayas, fieles.


Cumpleaños de amor - Ángel González

lunes, 18 de junio de 2007

Coldplay - The Scientist

Come up to meet you, tell you I’m sorry,
You don’t know how lovely you are.
I had to find you, tell you I need you,
Tell you I set you apart.

Tell me your secrets and ask me your questions,
Oh, lets go back to the start.
Running in circles, coming in tales,
Heads are a science apart.

Nobody said it was easy,
It's such a shame for us to part.
Nobody said it was easy,
No-one ever said it would be this hard,
Oh take me back to the start.

I was just guessing at numbers and figures,
Pulling your puzzles apart.
Questions of science, science and progress,
Do not speak as loud as my heart.

And tell me you love me, come back and haunt me,
Oh and I rush to the start.
Running in circles, chasing tails,
And coming back as we are.

Nobody said it was easy,
oh its such a shame for us to part.
Nobody said it was easy,
No-one ever said it would be so hard.

Im going back to the start.

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Recargando las pilas...

Un fin de semana que había empezado con el pie izquierdo -¡y tan izquierdo!- y que al final se ha arreglado poco a poco hasta acabar genial (lo prefiero a empezarlo bien y que me deje mal sabor de boca).

El viernes de fiesta... no hasta tarde, pero el tiempo suficiente para cumplir con uno de los refranes más cierto: lo bueno si breve... ¡dos veces bueno! -debería aplicarlo siempre, mejor me iría-. El caso es que tenía ganas de desconectar, de desquitarme y de pasarmelo bien.

Relax, relax, relax... y conversaciones interesantes antes de irse a dormir. Fin de semana familiar, de esos que me gustan tanto.

¡Y el Athletic que no baja! :-)

jueves, 14 de junio de 2007

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¿Alguien me puede explicar qué hay de malo en decir las cosas como son? Poner las cartas sobre la mesa... A veces resulta ingenuo; es más, resulta estúpido hacerlo sobre todo sabiendo que lo harás y los demás jugarán con ventaja.

Que conste en acta que, aunque ingenuo y estúpido, me gustan las cosas claras.

Ya que estamos, me gustaría saber cuánto tardais en poner las ideas en claro, sacar conclusiones y tomar decisiones... Claro que dependería de qué estuviéramos hablando... Poneos en el caso más difícil.

¿Una semana? ¿dos? ¿un mes?

¿Hay alguien que quiera estar dándole vueltas a una misma cosa durante meses y meses, sin poder pensar en otra cosa y todo el día preocupado? Creía que cuando uno solucionaba un problema se quitaba un peso de encima...

Hay varios pasos: 1) Analizar el problema/cuestión 2) Ver las posibles soluciones/opciones 3) Escribir en un papel pros y contras de cada una de las opciones 4) Comparar 5) Elegir 6) Ser consecuente con lo que se ha elegido.

Ante todo, hay que tener claro que cuando se elige un camino se deja atrás otro. Es lo que hay. Si pudiéramos vivir dos vidas a la vez ya no seríamos hombres; seríamos dioses. En mi opinión es cuestión de afrontar que llega un momento en que tienes que elegir y tomar decisiones. Es la vida.

Como siempre, varios temas al mismo tiempo.

lunes, 11 de junio de 2007

Érase una vez... (II)

Por fragmentos esta historia del príncipe oscuro y la muchacha desencantada os he de ir relatando, según a mis viejos oídos vaya llegando.

El príncipe oscuro

Quedose el príncipe sumido en la más absoluta perplejidad. Si bien había presenciado el momento en primera persona, necesitaba palabras y algún hecho al que agarrarse. No fue un sueño, se decía –aunque lo pareciera-.

Puesto que la muchacha desencantada desapareció tan rápido como llegó, muchas veces se le antojaba producto de su imaginación. Habían pasado ya varios meses sin noticia alguna de su paradero; sus pesquisas hizo el príncipe oscuro desde aquella noche inacabada y fruto de ellas la sabía en la misma ciudad que abandonó en busca de aventuras tiempo atrás. Aunque nuevos y desconocidos caminos había tomado su vida desde aquel fugaz encuentro, no era capaz el príncipe de olvidarla.

Cada noche despertaba empapado mientras los lugareños eran testigos de sus desvelos. Era frecuente, según decían, verle asomado a la ventana de su alcoba, presa del insomnio y la soledad, antes del amanecer -cuando los labriegos salían a faenar a sus campos, rastrillos al hombro-.

Cuentan que temía el príncipe convertirse en protagonista de una de las innumerables historias que circulaban por la región puesto que, aún en vida, se acercaban curiosos los aldeanos al castillo. Circulaba el rumor de que el príncipe había muerto y de que, en las noches claras, se podía ver su sombra vagando por los alrededores.

Se creía el príncipe preso de una maldición ancestral que no le dejaría descansar en paz hasta hallar a la muchacha desencantada. Es la leyenda que, narrada de boca en boca, cuenta que el príncipe, a lomos de su mejor caballo, partió en busca de la muchacha.

Si la encontró o no, eso ya es otra historia.

Ramón de Mielina

jueves, 7 de junio de 2007

martes, 5 de junio de 2007

...

[I]
Recuerde el alma dormida,
avive el seso e despierte,
contemplando
cómo se passa la vida;
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el plazer;
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parescer;
cualquiere tiempo passado
fue mejor

[II]
Pues si vemos lo presente,
cómo en un punto s'es ido
e acabado, si juzgamos sabiamente,
daremos lo non venido
por passado.
Non se engañe nadi, no,
pensando que ha de durar
lo que espera
más que duró lo que vio,
pues que todo ha de passar
por tal manera.

[III]
Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
qu'es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
e consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
e más chicos,
allegados, son iguales
los que viven por sus manos
e los ricos.

(...)

[VIII]
Ved de cuán poco valor
son las cosas tras que andamos
y corremos,
que, en este mudo traidor,
aun primero que muramos
las perdemos.
Dellas deshaze la edad,
dellas casos desastrados
que acaeçen,
dellas, por su calidad,
en los más altos estados
desfallescen.

[IX]
Dezidme:La hermosura,
la gentil fiescura y tez
de la cara,
la color e la blancura,
cuando viene la vejez,
¿cuál se para?
Las mañas e ligereza
e la fuerça corporal
de juventud,
todo se toma graveza
cuando llega el arrabal
de senectud.

(...)

[XL]
Assí, con tal entender,
todos sentidos humanos
conservados,
cercado de su mujer
y de sus hijos e hermanos
e criados,
dio el alma a quien gela dio
(el cual la ponga en el cielo
en su gloria),
que aunque la vida perdió,
dexónos harto consuelo
su memoria.

Jorge Manrique

lunes, 4 de junio de 2007

Flores de verano


Lo[s] Cinético[s] (II)

¡Por fin!

En general, un mareo de exposición; demasiados cambios de luces, movimientos, zonas oscuras con luces que parecían de disco... Me gustó pero cuando salí y vi que las cosas no se movían ni parpadeaban luces por todos los lados, respiré tranquilo...

Todo tenía un toque infantil, como si un grupo de niños -futuros ingenieros, con sus gafas y sus tiritas- se hubieran construido sus propios juguetes. Me recordó a la película La Ciencia del Sueño, los inventos de Leonardo da Vinci y la Fábrica de Chocolate (de Charlie).

La mejor instalación: Obra Penetrable, 1982 (Jesús Rafael Soto). La cruzabas y parecía que estabas rodeado de niebla por todos los lados.