Ayer vi un señor en el metro, un abuelito... y me recordó a ti. De hecho, podrías ser él cuando seas mayor. Me hizo gracia verte ahí, sentado en el metro, delante de mí, nervioso porque yo te miraba fijamente. La verdad, me quedé en shock... estabas ahí, solo que eras 50 años mayor, pero eras tú. Los mismos ojos tristes, la misma boca... ¡¡¡eras tú!!!! Y te pusiste nervioso y no sabías qué hacer con las manos, a dónde mirar, qué hacer. Me hiciste guerra de miradas, pero gané yo porque estaba tan alucinada de verte que no podía quitar los ojos de ti. Y, la verdad, qué quieres que te diga, creo que cuando seas mayor vas a ser un abuelito entrañable, con ojos melancólicos y cara de buena persona.
2 comentarios:
A mi me ha pasado alguna vez :) en serio!!!Ver a alguien mayor y pensar en que así será alguna persona cercana dentro de un "monton" de años! La verdad es q hay caras de extraños que te despiertan un algo especial...casi el querer conocerlos!
Claro, que tb a veces veo perros y pienso...este se parece a mi vecino, debería ser su perro! :D
aveces pasa.
Publicar un comentario